jueves, 1 de octubre de 2015

Análisis sintáctico

Hombre de Vitruvio (Canon de las proporciones humanas)
Leonardo da Vinci
Dibujo
Galería de la Academia de Venecia, Venecia, Italia.

Hombre:
no eres más
que un sustantivo común,
bastante impropio;
un sujeto
de lo más desinencial,
generalmente compuesto,
demasiado complejo
(con determinantes excesivas)
y extremadamente paciente
para mi necesidad y gusto.

A veces,
- no con mucha frecuencia –
desearía que fueras
un nombre propio
- no de mi propiedad, pero apropiado –
un sujeto expreso,
simple,
agente y paciente
al mismo tiempo,
y, de ser posible,
incomplejo.

Pero, en fin…
yo tampoco soy
sujeto agente
y tal vez exista
en algún sitio
un sujeto paciente
esperando
que yo realice
aquella tan manida
acción del verbo.

Sin embargo,
a estas alturas del partido,
las proposiciones no son lo mío
y si alguna vez cayera
en esa tentación
es muy probable que logre una
discutiblemente lógica.


De Amores que jamás florecieron
© 272608 I.S.B.N. 978-956-368-153-6